Llega el buen tiempo y con él la época de bodas. Al ajetreo de toda la organización, los invitados, el vestido y el menú, se le suma el deseo de lucir el mejor aspecto para un día tan especial. Pero el estrés propio de la organización de un evento como este no ayuda demasiado. Y si a eso le sumas, que ya no nos casamos tan jóvenes como antes, recurrir a la medicina estética es sin duda una buena baza para que la belleza de la felicidad se refleje en nuestro rostro, tanto si somos la novia, el novio o los padres.

Hace unas cuantas décadas, las parejas llegaban al altar dentro de la veintena, por lo que las arrugas, la flacidez o la falta de tono de la piel no era una de sus preocupaciones. Hoy en día nos casamos más maduros, hasta 11 años después que en los años 70. Por lo que la media de edad ha pasado de los 24 a los 34 en ellas, y de los 26 a los 37 años en ellos. Y, además, las segundas (o terceras) nupcias después de los 40 son cada vez más habituales.

Por ello es importante saber escoger el tratamiento que mejor se adapta a nuestras necesidades para que el día de nuestra boda sea especial en todos los sentidos. Además, estos tratamientos están indicados tanto para ellos como para ellas. Pues no nos olvidemos que el 25 % de los pacientes de tratamientos estéticos son ya varones.

Tratamientos estéticos para novias de 20 a 30 años

De los 20 a los 30: Aunque la juventud cuenta a nuestro favor, nunca es demasiado pronto para empezar a cuidar la piel. Los tratamientos de cabina son, habitualmente, los más indicados en esta franja de edad. En IM CLINIC proponemos protocolos individualizados para las pieles más jóvenes como La Cura By Natura Bissé, un tratamiento exclusivo que regenera, purifica y aporta luminosidad al rostro dejando un aspecto cuidado y aterciopelado a la piel. Es ideal combinarlo con sesiones faciales de Endermologie de LPG, pues estimula la síntesis de colágeno y elastina y prepara la piel para asimilar los nutrientes necesarios para que el cutis luzca sin imperfecciones.

Tratamientos estéticos para novias no tan jóvenes

De los 30 a los 40: Es la edad en que más parejas se casan y es la época en la que aparecen las primeras arrugas y los primeros indicios de flacidez. A partir de los 30 el cuerpo ralentiza la producción de colágeno y elastina, encargados de aportar jugosidad, elasticidad y firmeza a la piel. Con esta pérdida se empiezan a hacer visibles los signos de la edad y hay que aportar al cutis los cuidados necesarios para su regeneración.

Para mejorar la calidad y la uniformidad de la piel, uno de los factores más importantes es la hidratación y revitalización de esta zona, para ello se puede optar el GlobalMesolift, uno de los tratamientos preferidos por muchas celebrities, consiste en microinyecciones superficiales de distintos principios activos que se combinan según las necesidades de cada paciente. Se trata de una combinación de ácido hialurónico (que otorga turgencia y volumen), vitaminas (principalmente A, C y E) y otros complejos esenciales que hidratan, nutren y protegen desde el interior. Este tratamiento estimula la hidratación de las capas más internas de la piel y la formación de colágeno y elastina, con lo que se consigue una piel mucho más luminosa, fresca y rejuvenecida, al tiempo que más tersa y con menos flacidez. Una vez hecho este tratamiento se recomiendan unas sesiones de Génesis by Mesoestetic, la radiofrecuencia más innovadora del mercado que incorpora la tecnología SmartDrivity™ y consigue unos resultados únicos.

Uno de los tratamientos rey (especialmente en ellos) es el tratamiento para eliminar arrugas y líneas de expresión. Actúa principalmente en las arrugas de expresión de la zona superior del rostro (por ejemplo, en el entrecejo o las arrugas de la frente). Es un tratamiento indoloro que ayuda a relajar la frente y evitar que las arrugas se pronuncien más. Consiste en unas microinyecciones en la zona a tratar y el resultado es un aspecto más relajado y rejuvenecido del rostro, sin perder la expresividad. La sesión dura unos 20 o 30 minutos y el efecto entre 6 y 8 meses.

Tratamientos estéticos para novias maduras

De los 40 a los 50: El envejecimiento se hace cada vez más evidente y hay que combatirlo incidiendo especialmente en las zonas más dañadas. Aquellas primeras arruguitas se convierten ahora en marcadas líneas de expresión. El cutis se muestra apagado, la piel, más fina e irregular. A estas marcas del tiempo hay que añadirle la falta de firmeza, que provoca un descolgamiento y desdibujamiento del óvalo facial. Estos factores desencadenan en una piel desgastada y fina que hace que aparentemos más edad de la que tenemos.

La mesoterapia y el tratamiento para eliminar arrugas y líneas de expresión están indicados para revitalizar el rostro, pero sin duda, uno de los tratamientos antiaging más novedosos para el rejuvenecimiento de esta zona es el plasma rico en factores de crecimiento (conocido popularmente como PRP) es una serie de proteínas que se encuentran en las plaquetas y que ayudan a acelerar la recuperación del tejido donde son inyectadas. Estas plaquetas se consiguen de una simple extracción de sangre del propio paciente que, después de centrifugarla, se inyecta a través de unas microinyecciones en el cuello y el escote. El proceso dura unos 30 minutos y es prácticamente indoloro.  Con este tratamiento se consigue que sea el propio organismo del paciente el que se autogenere. Así, la piel se repara mediante la activación de fibroblastos (células que producen colágeno, elastina y ácido hialurónico) mejorando la tersura de la piel, una mayor luminosidad, un aumento del tono de la piel y un mayor grosor.

En esta franja de edad, las bolsas de los ojos o los párpados caídos puede ser habitual. La flacidez de la piel del párpado hace que éste caiga sobre el ojo, la acumulación de grasa en la parte inferior, la pérdida de inclinación de los ojos o de grasa a su alrededor que da una apariencia de ojos hundidos… dan al rostro una expresión opaca, cansada o malhumorada. La blefaroplastia global es una técnica que permite eliminar aquello que sobra (grasa, piel, bolsas) y devolver al rostro aquello que se ha perdido (inclinación de los ojos, grasa facial, altura de las cejas), para rejuvenecer y embellecer toda la zona de los ojos en su conjunto.

Un consejo importante. Cuando nos decidamos por mejorar la calidad y la tersura de nuestro cutis, no nos olvidemos nunca del cuello y del escote para conseguir un resultado armónico y rejuvenecido en su conjunto.